Menopausia sin hormonas: el trébol rojo como alternativa
Publicado el 02/05/2025 - Última actualización el 02/05/2025

Si estás aquí, no es porque te interese la botánica. Lo que quieres saber es: ¿Esto me va a ayudar con mis sofocos? ¿Dormiré mejor? ¿Volveré a sentirme yo misma?
Lo interesante del trébol rojo es que contiene unas sustancias llamadas isoflavonas, que funcionan como fitoestrógenos (= imitan de forma suave el efecto de los estrógenos que el cuerpo deja de producir en esta etapa).
Por eso muchas marcas lo incluyen en suplementos "especial menopausia".
¿Cuáles son los beneficios del trébol rojo?
Esta planta se ha estudiado sobre todo por su posible efecto en los síntomas típicos de la menopausia, como:
- Sofocos y sudores nocturnos
- Cambios de humor o sensación de irritabilidad constante
- Dificultad para dormir o mantener el sueño
- Sequedad vaginal
- Cambios en la piel o el cabello, más secos o quebradizos
- Y en menor medida, posibles beneficios en los huesos y en el colesterol
¿Y funciona de verdad?
La respuesta es sí, pero no es una solución mágica (ni funciona igual para todo el mundo). Sin embargo, varias investigaciones han demostrado que el trébol rojo puede reducir la frecuencia y la intensidad de los sofocos, sobre todo en mujeres que tienen muchos al día (más de 5). Algunas mujeres notan una mejora clara tras unas semanas.
También hay estudios que han visto una mejora en la sequedad vaginal y cierta estabilidad emocional. Incluso algunas mujeres dicen que duermen mejor o que se sienten con más equilibrio.
¿Por qué no funciona igual para todas?
Hay factores internos que influyen, como por ejemplo:
- La forma en que tu cuerpo metaboliza las isoflavonas
- Tu microbiota intestinal
- Tu nivel de estrógenos o si estás en perimenopausia o postmenopausia
- Y también, la calidad del suplemento que estés tomando (que no todos son iguales, ya hablaremos de eso más adelante)
Así que si a tu amiga le fue genial y a ti no te hace nada... no te extrañes. No es culpa tuya. Cada cuerpo es un mundo, y a veces hay que probar para saber si es tu caso.
¿Cómo se consume el trébol rojo?
Lo vas a encontrar en forma de:
- Cápsulas, con extracto seco de trébol rojo
- Gotas líquidas o extracto fluido (menos común, pero también existen)
- Y también en infusiones (aunque la cantidad de isoflavonas aquí suele ser bastante menor)
Si lo que quieres es un efecto real sobre los síntomas de la menopausia, lo más recomendable es optar por suplementos estandarizados, es decir, que indiquen claramente la cantidad de isoflavonas (que son las sustancias activas).
Dosis adecuada
Los estudios que han mostrado beneficios utilizan una dosis de entre 40 y 70 mg de isoflavonas al día. Muchas marcas ofrecen cápsulas con 40 mg, por lo que se suele tomar una o dos al día, según el producto y la recomendación del fabricante.
Asegúrate de que el suplemento indica claramente cuántos miligramos de isoflavonas contiene, y no solo “extracto de trébol rojo” sin más. Porque si no sabes lo que estás tomando, difícil saber si funcionará.
Durante cuánto tiempo hay que tomarlo
Aquí va un dato importante: el efecto no es inmediato. No esperes milagros en 3 días. En la mayoría de estudios, las mujeres comenzaron a notar mejoría tras unas 4 a 8 semanas. Algunas tardan un poco más, otras menos.
Por eso, se recomienda probarlo durante al menos 2 o 3 meses antes de sacar conclusiones. Si no notas nada tras ese tiempo, puedes valorar si seguir o buscar otras opciones.
A qué hora del día se toma
No hay una regla universal, pero muchas mujeres prefieren tomarlo:
- por la noche, si el objetivo es mejorar el sueño o los sudores nocturnos
- dividido en 2 tomas (mañana y noche) si estás con dos cápsulas al día, para mantener un nivel más constante
En cualquier caso, lo ideal es ser regular, tomarlo todos los días, y no olvidarte (que al final es lo que más influye).
Efectos secundarios y precauciones
Según los estudios, el trébol rojo es seguro para la mayoría de mujeres menopáusicas cuando se toma en las dosis habituales (entre 40 y 70 mg de isoflavonas al día). No se ha visto que cause efectos graves, ni problemas hormonales serios en órganos como el útero o las mamas, al menos en tratamientos de hasta dos años.
Efectos secundarios: la mayoría de mujeres no experimenta nada raro. Pero algunas pueden notar:
- Molestias digestivas leves: como gases, pesadez o náuseas
- Tensión o sensibilidad en el pecho
- Dolores de cabeza
- Pequeñas pérdidas de sangre vaginal (spotting), sobre todo al inicio
En general, estos efectos son transitorios y desaparecen al dejar el suplemento.
¿Y hay personas que no deberían tomarlo?
Sí. A pesar de ser un producto natural, el trébol rojo tiene un efecto tipo estrógeno, aunque suave. Por eso, no se recomienda en ciertos casos:
- Si has tenido cáncer de mama, de útero o de ovarios (sobre todo si era hormonodependiente)
- Si tienes hiperplasia endometrial, pólipos o miomas que respondan a estrógenos
- Si estás embarazada o en periodo de lactancia
- Si tienes endometriosis
- O si tu médico ya te ha dicho que evites cualquier cosa con fitoestrógenos
➜ En estos casos, lo mejor es no tomarlo sin una valoración médica.
¿Y si lo quiero usar durante mucho tiempo?
Aunque los estudios no han detectado problemas graves tras uno o dos años de uso continuo, no se recomienda tomarlo de forma indefinida sin control. Puedes hacer descansos, revisar con tu ginecóloga cómo vas, y ver si sigue siendo útil o si es momento de cambiar de enfoque.
¿Puede interferir con otros medicamentos?
Veamos los casos más relevantes:
- Tratamientos hormonales (THS)
Si ya estás con una terapia hormonal sustitutiva (estrógenos en pastillas, parches, gel…), añadir trébol rojo puede interferir. Ambas sustancias actúan sobre los mismos receptores, y no se sabe si su combinación es útil o más bien contraproducente. Mejor no mezclarlos sin que lo supervise tu médico.
- Tamoxifeno y otros fármacos para el cáncer de mama
Si has tenido un cáncer hormonodependiente y estás tomando medicamentos como tamoxifeno, el trébol rojo está totalmente contraindicado. Sus isoflavonas podrían reducir la eficacia del tratamiento, y eso es un riesgo serio.
- Anticoagulantes (como la warfarina o el acenocumarol)
El trébol rojo contiene pequeñas cantidades de compuestos con efecto anticoagulante leve. Por eso, podría potenciar el efecto de los anticoagulantes y aumentar el riesgo de sangrado. Si tomas Sintrom, Adiro o similares, habla primero con tu médico.
- Hormonas tiroideas (como la levotiroxina)
Por precaución, si tomas medicación para la tiroides, se recomienda separar varias horas la toma del trébol rojo, para evitar que afecte a la absorción del medicamento.
Cómo elegir un buen suplemento de trébol rojo
1. Revisa que esté estandarizado en isoflavonas
Lo hemos dicho antes, pero merece la pena insistir: este es el punto más importante. Asegúrate de que el producto indique cuántos miligramos de isoflavonas contiene por dosis diaria (no solo "extracto de trébol rojo"). Esas son las sustancias activas que te interesan para aliviar los síntomas de la menopausia.
Lo ideal: entre 40 y 70 mg de isoflavonas al día.
2. Prioriza formas concentradas y bien formuladas
Las presentaciones en cápsulas con extracto seco estandarizado suelen ser las más fiables. Las infusiones o polvos pueden estar bien como apoyo, pero su concentración de isoflavonas es mucho más variable (y a veces mínima).
También es recomendable que el suplemento esté formulado solo con flores de trébol rojo (y no con otras partes de la planta que no aportan lo mismo).
3. Busca garantías de calidad
Siempre que puedas, opta por productos que cuenten con:
- Buenas prácticas de fabricación
- Análisis de laboratorio independientes
- Y una marca transparente que ofrezca información clara sobre ingredientes, origen de la planta, y dosis.
Un precio razonable está bien, pero si es sospechosamente barato… algo falla. A veces lo barato sale caro, sobre todo en salud.
Conclusión: ¿merece la pena probar el trébol rojo?
Si estás pasando por la menopausia, no quieres o no puedes tomar un tratamiento hormonal, y buscas una opción más natural, el trébol rojo podría ser una alternativa interesante.
Hay mujeres a las que les va bien, y los estudios muestran que puede ayudar con los sofocos, la sequedad vaginal o incluso el estado de ánimo.
Como todo en salud, se trata de encontrar lo que te funciona a ti. Y si decides probarlo, que sea bien informada, con un producto de calidad, y sabiendo que no estás sola en esto.
Porque sí, la menopausia puede ser un rollo… pero también es una oportunidad para escucharte más, cuidarte mejor y reconectar contigo.